Autonivelante: el importante concreto de alto desempeño
Para lograr un buen diseño de concreto autonivelante es necesario hacer un estudio de la granulometría de los agregados a emplear, considerar la forma del grano y el empleo de un aditivo reductor de agua de alto rango, así como un aditivo modificador de viscosidad.
Para el concreto autonivelante pueden emplearse materiales cementantes como ceniza volante, escoria granulada, entre otras, que ayudan a mejorar la cohesión de la mezcla de concreto.
El concreto autonivelante se desarrolló con el objetivo de hacer procesos constructivos más eficientes, al disminuir la mano de obra empleada, así como el tiempo de colocación y consolidación del concreto, además de mejorar los acabados de las estructuras.
Por su fluidez se autonivela en la estructura donde es vaciado y por su propio peso es capaz de consolidarse sin necesidad de vibrado, obteniendo alta cohesión con la que se logra evitar la segregación durante el flujo del concreto.
Es necesario aclarar que un concreto con una elevada fluidez no equivale a un concreto autonivelante, ya que para ser considerado como tal debe tener la cohesión suficiente que garantice que las partículas de los agregados estén distribuidos de manera homogénea.
A diferencia de los concretos convencionales, para medir la trabajabilidad de éste tipo de concretos se realizan las siguientes pruebas:
Flujo de revenimiento
Índice de estabilidad visual
Placa T-50
Anillo “J”
Caja L
Segregación en estado fresco
Embudo en “V”